Vecinos de Santa Isabel, Punta Rubia, La Pedrera, San Sebastián de La Pedrera, están indignados  y juntan firmas para entregar a las autoridades con el objetivo de "evidenciar" que el único boliche bailable habilitado por la IDR no es " una propuesta turística" que acompañe "a su vez la convivencia de los pobladores" de los balnearios anteriormente mencionados.

Rochaaldía accedió a la carta en la que los residentes permanentes reclaman la clausura del boliche unicado en Ruta 10.

"el Boliche ALMA carece de un estudio de impacto serio, se realizó de forma intempestiva sin un análisis mesurado de posibles daños, de diversa índole, tanto en el corto como en el mediano plazo".

Los vecinos afirman que "el argumento principal para la creación de este emprendimiento comercial fue que Rocha carece de propuestas atractivas para jóvenes en caso de no contar con discotecas".  Dejan en manifiesto en esa misiva que "la realidad es que un boliche de 5000 personas no puede absorber a todos los jóvenes que llegan al balneario" y detallan los costos que deben abonar los jóvenes para participar de cada fiesta que allí se realiza.

"Conociendo esto, la entrada vale entre 25 y 110 dólares, se cobra estacionamiento y el valor de una cerveza supera los $350 pesos. Es posible cobrar estos precios porque la capacidad es limitada y muy restringida a un nicho, cayendo el argumento de

“propuesta turística del balneario” como justificativo válido. Otro de los argumentos presentados fue que existiendo esta propuesta se evita que los jóvenes festejen en la calle principal de La Pedrera".

Según los vecinos "ya quedó más que probado en estos pocos días de enero que esto no es así, sino todo lo contrario. Hoy en día hay 3 focos de aglomeraciones: uno privado en el establecimiento mencionado, otro en la vía pública y los que se producen en la previa a asistir a la discoteca y a la salida (after) de la misma, operando también como llamador para los que no asisten directamente a la propuesta".

Aseguran y defienden a los emprendimientos locales que son "los únicos no  aglomerados y sobreviviendo"...."resto-pubs locales que los cierran o multan si hay cierta cantidad de gente bailando (no queda claro el criterio); o los artistas locales que no pueden tocar en ningún lado porque complican a los comerciantes. Pero una banda como Márama sí puede convocar a más de 5000 personas. Se han condenado la rica y diversa propuesta local por una única propuesta que no deja nada en el lugar".

En otro orden, se señala que "a los residentes de la zona se les dijo que había un proyecto (hoy sabemos que no existe), que en ese proyecto no iba a haber escenario, que iban a participar negocios locales, que los parlantes iban a apuntar para el Oeste (hacia Rocha), que no se iba a escuchar la música en el Balneario, que el estacionamiento sería gratuito y que iban a estar a una distancia mínima de 700 metros de la entrada a los Balnearios. La realidad es que hay escenario, no participan negocios locales, los parlantes y toda la propuesta apunta hacia el mar, se escucha la música y las frecuencias vibran en todos los balnearios a la redonda. El estacionamiento se cobra 200 pesos por coche y el boliche está a menos de 700 metros de la entrada del Balneario Punta Rubia.

Queremos agregar a lo anteriormente mencionado, todas las externalidades y perjuicios que se están generando. A los vecinos nos están robando en nuestras casas, más de una vez, y no hay móviles policiales disponibles. Hay fiestas previas y afters por todos lados y no hay inspectores suficientes. Sin embargo, al momento de ir hasta el lugar, se puede visualizar más de 7 policías motorizados, 4 efectivos a pie, un móvil policial con dos policías, 4 inspectores de la intendencia más el policía que lo acompaña y la policía caminera. Claramente los 4 balnearios están rehenes del boliche y los servicios que deberían estar al servicio de la ciudadanía, están al servicio del establecimiento comercial privado".

Finalmente, en dicha carta los vecinos agregan, "si un vecino de Santa Isabel o Punta Rubia tiene que ir al hospital de emergencia, tiene casi 1 km. bloqueado por operativos, gente caminando por la mitad de la ruta, violencia ante cualquier pedido de abrirse o tocar bocina. Lo mismo si bomberos, policías o ambulancias tienen que ingresar a Punta Rubia o Santa Isabel, se encontrarán con casi 1 km. bloqueado. Algo sin precedentes y que también nos preocupa y da miedo. Por último pero no menos importante, no podemos dejar de lado la pandemia que estamos atravesando en particular en este departamento y cómo estas aglomeraciones multitudinarias implican un foco de contagio, como ha ocurrido en otras zonas del país, con el riesgo de saturar los servicios asistenciales locales".