El silencio del Museo Regional “Milton de los Santos” se prepara para hablar en voz baja, con el tono pausado de la historia. Este miércoles 29 de octubre, a las 19:30 horas, el museo abrirá sus puertas para una conferencia que busca mirar más allá de las vitrinas: “Nuevas imágenes misioneras del Museo de Rocha. Testimonio de la presencia indígena en el Uruguay”, a cargo del investigador Alejandro Ferrari.

La charla propone un viaje hacia el tiempo de las Misiones Jesuíticas, cuando el arte y la fe se entrelazaban con la cosmovisión guaraní. Las imágenes que hoy custodia el museo, talladas hace siglos en talleres misioneros, son más que piezas de devoción: son testigos materiales de la presencia indígena en la Banda Oriental, una presencia que el discurso histórico muchas veces relegó al margen.

El eco de las Misiones en la Banda Oriental

Ferrari invita a recorrer un territorio simbólico y real: la red de estancias misioneras y la llamada “Vaquería del Mar”, que unió las rutas de la economía jesuítica con los caminos del ganado cimarrón.
Pero su propuesta va más allá de la arqueología. Cada figura, cada talla, dialoga con nuestra identidad: los nombres guaraníes que aún designan ríos y pueblos; las costumbres heredadas, como el mate compartido; las palabras que sobrevivieron en la lengua cotidiana.

El encuentro no busca solo rescatar objetos, sino devolverles voz. En tiempos donde la memoria indígena parece difusa, estas imágenes emergen como fragmentos de una historia que sigue latiendo bajo la superficie de la modernidad.

Un símbolo que interpela al presente

El Museo de Rocha se consolida así como espacio de diálogo entre pasado y presente, donde la herencia misionera deja de ser reliquia para transformarse en espejo.
La conferencia de Alejandro Ferrari, organizada por la Dirección de Cultura de Rocha, invita a repensar el relato nacional desde sus márgenes, donde la espiritualidad, el arte y la identidad indígena conviven como una sola trama.

Porque, en definitiva, reconocer las huellas del pasado es también una forma de reconciliarnos con lo que fuimos —y con lo que todavía somos.